Las prácticas en la formación universitaria en podología son fundamentales para la adquisición de habilidades y competencias prácticas por parte de los estudiantes. Estas prácticas permiten que los estudiantes puedan aplicar los conocimientos teóricos adquiridos en el aula en un entorno clínico real, y así mejorar su capacidad de diagnóstico y tratamiento de problemas podológicos. Además, las prácticas también son importantes para que los estudiantes puedan desarrollar habilidades de comunicación con pacientes y otros profesionales de la salud, y para que puedan aprender de la experiencia de los profesionales que los supervisan. En resumen, las prácticas son una parte integral de la formación universitaria en podología, ya que contribuyen significativamente a la preparación de los estudiantes para el ejercicio de la profesión.

En este caso, Lucía Martínez, alumna de cuarto, presentó casos clínicos que ha podido abordar durante sus prácticas y lo hizo genial.