El día 20 de Noviembre l@s madrugador@s del Campus se vieron sorprendidos por la presencia de 7 tiendas de campaña que daban cobijo a 20 campistas cuyo sueño fue visibilizar y reflexionar sobre las causas de la pobreza infantil en el Mundo. Y es que 3,1 Acampada 0,7 contra la pobreza infantil con motivo del Día Internacional del Niñomillones de niños mueren cada año, siendo la nutrición deficiente la causa de casi la mitad (45%) de las muertes en niños menores de cinco (2014, PMA, ONU) y somos la primera generación capaz de erradicar la pobreza. Se necesita voluntad.

Varias fueron las actividades que compartimos durante la tarde unas 25 personas (alumnos/as de ambas Facultades, profesorado y Pas), entre ellas una gymkana de países en que las alumnas de trabajo social nos mostraron las virtudes (que también las tienen… ) de varios países empobrecidos como Guinea Bissau, Bolivia, La India y otros como Japón. El departamento de Incidencia Social de las ONGD PROYDE, PROCLADE y SED nos mostró la otra cara de nuestro estilo de vida consumista y las consecuencias invisibles e implacables para los países empobrecidos. Como resultado de la reflexión conjunta se creó un Manifiesto por el consumo responsable que nos compromete a modificar nuestras actitudes personales para provocar una transformación social que haga posible acabar con situaciones de pobreza e injusticia en el mundo. Invitamos a todo el campus a unirse al mismo.

Además se compartieron risas, cena, canciones y danza oriental. Por la mañana un café de comercio justo nos volvió a la realidad. Siguen las clases y nuestra vida cotidiana, pero una idea nos ronda y así quedó reflejada por un anónimo en el muro de opiniones: ESTE MUNDO ESTÁ EMBARAZADO DE OTRO MUNDO POSIBLE, más justo para el medio ambiente y para todos y todas.

 

MANIFIESTO POR EL CONSUMO RESPONSABLE – LA SALLE ARAVACA

El alumnado del Centro Universitario La Salle en Aravaca (Madrid), reunido en la actividad de Acampada por el 0,7 en el Campus de la Universidad, expresamos nuestra preocupación por los efectos de nuestro consumismo sobre las posibilidades de desarrollo sostenible del planeta y de las propias personas. Estamos convencidos de que es importante modificar nuestras actitudes personales para provocar una transformación social que haga posible acabar con situaciones de pobreza e injusticia en el mundo, tanto en lo que se refiere a situaciones de fuerte desigualdad en nuestro propio entorno como también en los países empobrecidos, los más perjudicados por los efectos del desenfrenado ritmo de consumo de los países donantes.

Identificamos como principales impactos del consumismo: la contaminación y el cambio climático, la explotación laboral, la expulsión de la gente de sus propios hogares, el desperdicio de comida, la falta de concienciación/sensibilización social y la falta de voluntad política y empresarial para generar cambios necesarios para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Con la convicción de que un mundo mejor es posible, creemos que la transformación social tiene que conducir a una serie de cambios tanto en las instituciones públicas como en las empresas.

Por ello, instamos a nuestros gobiernos a tomar medidas para transformar el mundo hacia uno que sea más justo, solidario y sostenible para el medio ambiente y las personas, a través de legislaciones que no permitan tirar comida o penalicen a aquellos que lo hacen. Así mismo, creemos necesario, como futuros educadores y trabajadores sociales, que se implanten asignaturas obligatorias en el currículo escolar en el que se abarquen temas sobre consumo responsable, educando desde la infancia en valores sobre el respeto al medio ambiente y la dignidad de las personas y los pueblos. Así mismo instamos a que se inicien acciones institucionales para visibilizar otras alternativas de consumo como el comercio justo.

Animamos a las empresas a implantar planes de responsabilidad social empresarial de forma obligatoria, así como a establecer la ética y el respeto a los Derechos Humanos en sus planes de expansión, de publicidad y de comercio internacional, minimizando los residuos contaminantes de su actividad.

Nos comprometemos a ser canales de transmisión en la sociedad para dar voz a las injusticias generadas a través, en parte, de nuestros comportamientos consumistas. Además, nos comprometemos a llevar a cabo alternativas al consumismo alargando la vida útil de los objetos; no dejándonos llevar por la presión de la publicidad, las marcas y las modas efímeras; optando por alternativas de compra como el comercio justo; implantando las 3R (reducir, reciclar, reutilizar) en nuestras vidas y las de nuestros entornos, comenzando por la propia Universidad.

Desde nuestra profesión trabajaremos para crear instancias de intercambio que generen empatía en centros educativos y sociales con el objetivo final de que la infancia y la juventud sean partícipes del mensaje de la necesidad de cambiar nuestro consumo para favorecer situaciones de justicia social.

Por un consumo responsable que se preocupe por las personas.